Si hay un restaurante ejemplar en cuanto a la iluminación
ese es NODO de Dani Freixes, en colaboración con Juan Acero.
Ingo Maurer decía que
la mayor parte del tiempo la oscuridad le envolvía como una manta protectora, y
que solo en escasos momentos hacia que se sintiera un poco inquieto. Es el
viejo tema de la luz contra la oscuridad que se repite en este proyecto.
NO-DO abrió sus puertas en 1998 en Madrid por
iniciativa del restaurador Benjamín Calles y con Alberto Chicote al frente de
los fogones. Fueron pioneros en fusionar la cocina española y la japonesa; y el
local, de estética moderna y minimalista, se convirtió en el perfecto
escaparate de las últimas tendencias gastronómicas.
El techo de paneles de madera
chapada permite ocultar los elementos de iluminación de las mesas, resueltos
con fibra óptica.
Son unos huecos circulares dispuestos
ordenadamente en techo del comedor privado que incorporan lámparas xenón para
proporcionar una iluminación indirecta y uniforme en toda la sala, completada
por los biombos-lámpara de madera que permiten distribuir de diferentes maneras
la sala.
Los elementos verticales interiores, realizados con vidrios laminados con chapa de madera en su interior, iluminados con luz fluorescente cálida por la parte posterior, se convierten en lámparas que complementan la iluminación directa de las mesas y de la barra del bar.
Con estos elementos de madera iluminada se resuelven también la mesa de la cocina y la pared de luz de los baños.
Los inodoros se cierran con vidrio laminado de manera que puedan disponer en su interior de luz natural durante el día, y convertirse durante las horas nocturnas, por el contrario, en lámpara que ilumina el resto de los aseos, gracias a la luz emitida por las paredes de luz de madera, que actúa como difusora.
De esta manera, la reiterada utilización
de un mismo elemento permite integrar la diferenciación de zonas del
restaurante, los dos comedores del piso inferior con la cocina, y con los espacios
de la planta superior.
La misma línea de iluminación la encontramos
en Pandelujo, del mismo diseñador y promotor, aunque con algunas variaciones
entre el día y la noche.
En abril Benjamín Calles decidió darle otra
vuelta a NODO, renovándolo. Habrá noticias de la nueva construcción, mientras tanto os dejo con la NODO DEMOLION PARTY, una fiesta de despedida de lo
más divertida. http://www.restaurantenodo.es/